Día 5 de noviembre de 2021

Oración de los primeros viernes de mes

«En la Misa es donde tengo toda mi alegría, todo mi consuelo y alivio en medio de todas las aflicciones. En ella se me dan sentimientos altísimos de la Majestad de aquel Señor, cuya presencia siento tan palpablemente que me hallo inmutado regularmente desde la Consagración. En el tiempo de consumir, son especiales los rayos de luz con que ilustra mi fe, y los ardores soberanos en que se abrasa el alma, que se entiende allá con el Corazón de su Dios» (Beato Bernardo F. de Hoyos) 

En este mes en que celebraremos la fiesta del beato Bernardo Francisco de Hoyos, comenzamos una serie de Primeros Viernes dedicados a este gran apóstol del Corazón de Jesús en España. Nos vamos a acercar a su vida y a su corazón de fuego. 

Bernardo nació en Torrelobatón (Valladolid) el 21 de agosto de 1711. Era alegre e intrépido. Ya desde muy niño su deseo era que todos amasen a Jesús. Incluso en una ocasión, a los 7 años, se subió a un púlpito improvisado en la plaza del pueblo y predicó a todos los niños lo que había oído en misa. Sus padres lo enviaron a estudiar al colegio de los jesuitas en Medina del Campo, donde vivió con una tía suya. Allí creció en piedad y fervor. Un día, el ardiente Bernardo se escapó a Madrid, porque quería aprender más. 

Señor, gracias por el regalo de poder conocer, poco a poco, la belleza del corazón ardiente del beato padre Hoyos. Enséñame a vivir y amar, como él, la Eucaristía. Dame la Gracia de encontrar en ella toda mi alegría, todo mi consuelo, todo mi alivio. Dame la Gracia de acoger en lo profundo de mi ser tu Presencia al comulgar y dejarme abrasar en el ardiente Amor que brota de tu Corazón.  

JESÚS, MANSO Y HUMILDE DE CORAZÓN, HAZ MI CORAZÓN SEMEJANTE AL TUYO. 

Compositor e intérprete de la canción: Javier Salvado Romero.